viernes, 20 de diciembre de 2013

La crítica del año

Como todos los años, 2013 ha sido un año cargado de estrenos y muchos de ellos, tanto de cine como (novedad de este año), televisión, han sido reseñados en este blog, así que he decidido empezar una nueva sección anual: la crítica del año.

Se trata de que valoréis mis críticas, a ver cual os ha gustado más. Os diría que se regala un jamón al ganador, pero sinceramente, no os puedo dar premio alguno, así que espero que os baste con que gane vuestra crítica. Doy de plazo hasta el día de reyes, 6 de enero, para votar, así os doy tiempo para pensarlo bien, aunque igual hago un recuento antes.

De esta clasificación dejo fuera el artículo sobre la trilogía de Batman porque no es una crítica, sino un artículo de opinión.

Os pido que no valoréis el producto en sí, sino mi crítica. Si está bien redactada, si deja claro de que va la peli, etc. He abierto una encuesta para que os sea más cómodo votar, y aquí os dejo los links a todas para que podáis repasarlas y comparar:

Jack el cazagigantes: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/03/jack-el-cazagigantes.html

G. I. Joe: La venganza: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/03/g-i-joe-la-venganza.html

Iron man 3: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/05/iron-man-3.html

El hombre de acero: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/06/el-hombre-de-acero_22.html

Gran hotel: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/06/gran-hotel.html

Expediente Warren: The Conjuring: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/07/expediente-warren-conjuring.html

Lobezno inmortal: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/07/lobezno-inmortal.html

Gravity: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/10/gravity.html

El juego de Ender: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/11/el-juego-de-ender.html

El hobbit: la desolación de Smaug: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/12/el-hobbit-la-desolacion-de-smaug.html

¡Muchas gracias a todos por participar!!!!!!!!!!!!!! :D :D :D

sábado, 14 de diciembre de 2013

El hobbit: la desolación de Smaug


Continuación de El hobbit: un viaje inesperado, vemos como las andanzas de Thorin Escudo de roble y sus compañeros continúan en pos del tesoro del dragón Smaug.

Antes de nada, y para todos aquellos fanáticos de Tolkien y de las adaptaciones en general que os rasgasteis las vestiduras cuando Tom Bombadil no apareció en el metraje, que consideráis que la escena en la que Sam regala sus cubiertos a no recuerdo quien es imprescindible o que proclamáis a los cuatro vientos que las películas son una traición a la obra de Tolkien, un consejo: id a ver esta peli. No os va a gustar nada, vais a pasarlo fatal en el cine e incluso os van a dar ganas de ir a casa de Jackson y pegarle un tiro, pero lo que vais a disfrutar después poniéndola a parir y despotricando contra el director, los actores y las escenas gratuitas, no tiene precio.

Dejando aparte el texto arriba descrito, y que resume a la perfección el único "fallo" de la película, El hobbit: la desolación de Smaug es un frenético espectáculo visual de acción trepidante que se disfruta al cien por cien de principio a fin. Esta película es la antítesis del aburrimiento, pura diversión. Las escenas de acción están muy bien hechas, con un gran sentido del humor (al igual que la primera, e incluso más en ocasiones) y asistir al espectáculo visual que supone este filme es regocijarse de un equipo de coreógrafos y extras que tienen muy claro que es lo que pide el público hoy en día. Ojo, valga decir que esto es cine palomitero y comercial, si quiero ver algo intelectual obviamente no voy a mirar este tipo de producciones...

La verdad es que, aparte de lo mal adaptada que está (con algo de exceso de metraje para alargarla, pero obviamente quien no se haya leído el libro no se dará cuenta) no le puedo encontrar ningún defecto. Visualmente es una maravilla, sobre todo Smaug, que ya podemos ver en toda su magnífica horripilancia y te deja sin aliento. La música acompaña a la perfección, los decorados, los ya mencionados efectos especiales... en resumen, puro espectáculo, cine de acción de primer orden. Y, sobre todo, que en ningún momento decae la acción, no aburre, sales del cine encantado. Para mí, una de las mejores películas palomiteras del año (por cierto, estoy pensando en hacer un ranking puntuando lo que he criticado este año... ¿qué os parece la idea?)

Y ahora, toca esperar un año para ver la conclusión, pero mientras... ¡disfrutemos de esta!

sábado, 9 de noviembre de 2013

El juego de Ender


En una Tierra superpoblada donde solamente se permite tener dos hijos como máximo se ha permitido el nacimiento de Andrew "Ender" Wiggin, un niño destinado a convertirse en el general que acabe con la amenaza  de los insectores, una raza alienígena que estuvo a punto de aniquilar a la humanidad hace cincuenta años. A los seis años, el joven Ender es llevado a la academia militar situada en el espacio para empezar su instrucción.

Basada en la obra de Orson Scott Card, y con más de 20 años en gestación, es una de esas películas que he ido a ver esperando un espectáculo efectista en el que se carguen por completo el argumento de la novela, y he salido viendo justo lo contrario. Aunque no se adapta el 100% del libro (algo, por otro lado, casi imposible en una película de dos horas), obviando por ejemplo la historia paralela en la Tierra, sí se hace con suficiente maestría como para que el argumento del mismo quede claro al espectador. Algo que no sorprende si tenemos en cuenta que el propio Scott Card ha participado en el guión.

Debe ser porque el cine de ciencia ficción puramente comercial se está reservando para los superhéroes, pero El juego de Ender, al igual que la novela, se centra mucho en los personajes y no tanto en el efectismo. Quizás su único defecto sea que se centra demasiado en el coronel Graff, pero claro, si tienes un actor como Harrison Ford obviamente tienes que aprovecharlo. Aparte de él y de Ben Kingsley (algo desaprovechado a mi juicio), destaca Asa Butterfield, quien ya me sorprendió en la maravillosa La invención de Hugo y que aquí vuelve a protagonizar. Este joven actor encarna a Ender de forma magistral, no se puede pedir más a alguien de su edad, al igual que sus compañeros y rivales. Los pensamientos y emociones quedan perfectamente reflejadas tanto en niños como en adultos, al igual que en la novela, ya que Scott Card es un maestro de la descripción emocional.

En cuanto a los aspectos técnicos, pues eso, cumplen muy bien en una película que podía haberse convertido en un nuevo Star Wars y que se aleja mucho de esa fórmula. Banda sonora que se ajusta perfectamente al tono militarista de la historia, escenarios espectaculares y efectos especiales que, sin ser nada del otro mundo, cumplen perfectamente.

En resumen: el que espere ver una película de ciencia ficción de batallas espaciales y acción espectacular, que huya de esta película y vaya a ver Thor: el mundo oscuro, que seguro que saldrá mil veces más complacido. No obstante, el que espere un argumento sólido y una película de ciencia ficción profunda y centrada en las emociones, que entre a ver El juego de Ender. Como comentario final, decir que es curioso que una película de Gavin Hood, director de Lobezno inmortal, me haya gustado tanto. Mi opinión sobre este director ha subido mucho. Mi valoración personal, un 8.

viernes, 11 de octubre de 2013

Gravity



Una misión rutinaria en el telescopio Hubble se torna en una lucha por la supervivencia cuando el transbordador espacial queda destrozado por los restos de un satélite.

Vaya por delante que en el visionado de esta película confluyeron muchas cosas que hacen que mi criterio no sea neutro. Para empezar, fui a verla invitado porque tampoco me causaba mucho interés, hizo una mala tarde y yo salí vestido muy a la fresca, lo que me provocó un intenso dolor de riñones que hizo que durante un momento no pudiese andar. Aún así, obviamente, ni Cuarón ni su cinta tienen la culpa de estos avatares, por lo que intentaré valorar la película como se merece.

Yo no tildaría Gravity de ciencia ficción. Sí, vale, es una película que transcurre en el espacio, pero ello no la hace de ciencia ficción. Es básicamente una historia de supervivencia, de aventuras si se prefiere, con la particularidad de que transcurre en el entorno más hostil que se pueda imaginar: el espacio exterior. De bella estética y cuidados (muy cuidados) planos, resulta una película absorbente por su intensa calidad visual, imprescindible visionarla en 3D. Cuarón, director mexicano poco prolífico pero que suele dar muy buenos resultados, demuestra su gran talento en el manejo de la fotografía, sobre todo con un telón de fondo tan soso visualmente hablando como el espacio exterior (aquí no se pueden cometer los excesos de, por ejemplo, Star Wars).

Por otro lado, la atmósfera opresiva y a la vez amplia del espacio está muy bien recreada, para mi sin duda es lo mejor de la película. Llegas realmente a agobiarte, a meterte en la piel de los personajes y a pensar que eso no puede acabar bien. Asistes a hora y media de angustia como si realmente estuvieras embutido en un traje espacial. Cuarón logra realmente transmitir esa sensación, en algunas ocasiones de forma brillante, y más cuando lo estás viendo en una pantalla de cine y en 3D.

Analicemos la historia. Es eficaz, sobre todo para estar rodada con dos actores (George Clooney y Sandra Bullock, aunque la protagonista es esta última) y varias voces en off, pero no pasa de ahí. No se hace sosa, pero tampoco sorprende demasiado, salvo un par de giros en la trama sigue la línea marcada en todo momento. En resumen, es un tanto predecible y no muy diferente de otras películas del mismo género.

¿Su gran fallo? Pues, para mí, el de siempre: Sandra Bullock. Lo siento, pero no puedo con esta mujer, es superior a mis fuerzas, más después de ver que se barajaron a dos de mis actrices favoritas (Natalie Portman y Scarlett Johansson) para el papel. Cualquiera de ellas lo habría hecho mejor que miss Bullock a mi entender. Está en su línea, tampoco es que su papel necesite un prodigio de la interpretación (ni el de Clooney tampoco, para que nos vamos a engañar), pero podría haberle dado un poco más de fuerza, de empuje. Lo siento, pero el día que esta actriz me sorprenda está aún por llegar. Con todos mis respetos hacia sus admiradores, por supuesto. Hay que decir que no he visto The Blind Side, película por la que le dieron el Oscar. A lo mejor un visionado de este filme me hace cambiar mi opinión sobre esta actriz, pero de momento, así se queda.

En resumen: Gravity es una película que se puede disfrutar por su letal belleza. Le doy un 7, que podría elevarse a 8 si tuviera otra protagonista femenina.

sábado, 27 de julio de 2013

Lobezno inmortal

Empezamos en la II Guerra Mundial, durante el bombardeo de Nagasaki. Lobezno está escondido y salva a un soldado japonés. Saltamos al presente, un Lobezno traumatizado por la muerte de Jean Grey malvive hasta encontrarse con Yukio, una japonesa que le dice que el soldado, ahora un rico empresario, se está muriendo y quiere verle antes de que llegue el fatal desenlace. Logan viajará a Japón, sin saber que le espera una dura y peligrosa prueba... y un nuevo amor.

Película creada por y para lucimiento de Hugh Jackman, que se ha puesto super cuadrado para este filme, y además lo visten muy bien, luce palmito con esa ropa taaaaaan bonita... por desgracia, es lo único bonito de la película (para deleite de sus numerosas fans, por otro lado). Tiene un look entre machito y metrosexual, alejándose bastante de la imagen comiquera del superhéroe (que siempre ha sido un hombre "de pelo en pecho").

Realmente, lo dicho arriba es lo mejor que se puede decir. Argumentalmente hablando no está mal, pero es muy lenta, y en ocasiones incluso aburrida. Si no vas a poner acción, sustitúyelo con algo que no sean planos y más planos del protagonista, no sé, con algo de argumento. Por otro lado, la vinculan con la olvidable "X Men 3", poniéndole planos a Famke Janssen (o como se escriba) que, sinceramente, no aportan nada y tienden incluso a agobiar en ciertos momentos. En resumen, guión flojo y predecible, más predecible de lo habitual en una película de superhéroes.

En cuanto a los efectos visuales, a ver, no están mal, pero tampoco matan, son lo habitual. Lobezno bien, Víbora (a quien dotan de unos poderes que en el cómic no tiene, pero bueno, se perdona) bien, el Silver Samurai bien... nada destaca, pero bueno, en ese sentido no hay quejas.

Las interpretaciones, pues lo dicho, todo se resume en dos palabras: HUGH JACKMAN. El actor ocupa tanto espacio que eclipsa a cualquier otro. Los demás se dedican a bailar al son que marca el señor Jackman, sin más. No hay ningún otro papel a destacar, él se los come todos... por lo menos en Iron Man 3, Ben Kingsley hacía buen papel, pese a lo poco que me gustó la película.

Esta película me ha demostrado dos cosas: 1) que Hollywood podría gastarse el dinero en productos más dignos y 2) que el declive de los productos marvelitas detectado en Iron Man 3 continúa. Y no, no voy a compararla con Man of Steel, porque ya sería el acabose...

En resumen: película de pasar el rato y poco más, mi puntuación personal es un seis raspado. A la altura de Iron Man 3. La recomiendo para féminas y hombres homosexuales, que en este blog no se discrimina a nadie, cuyo actor favorito sea Hugh Jackman, van a babear de lo lindo. El resto... bueno...


sábado, 20 de julio de 2013

Expediente Warren: The Conjuring

Un matrimonio estadounidense, Ed y Lorraine Warren, se dedican a investigar diversos casos paranormales a lo largo de todo el territorio de los EEUU. Él es un experto demonólogo y ella posee poderes de clarividencia. Se encuentran con un caso especialmente difícil, una famila que ha comprado una casa al parecer habitada por entes sobrenaturales... Basada en una historia real.

Bien, "Expediente Warren" viene a confirmar algo que hace tiempo que tengo más que claro (igual algún día hago un artículo sobre ello): que la originalidad en el cine de terror murió hace mucho (posiblemente, en los 90, desde que vi "Entrevista con el vampiro", no he visto ninguna película de miedo que haya logrado sorprenderme realmente). Cuando dices de una película "esto me recuerda a..." un par de veces, te lo tomas como un homenaje, cuando lo dices quince veces... entonces es que la película es un refrito. Y eso le pasa a Expediente Warren, es un refrito de las geniales "El resplandor" y "El exorcista" con elementos de "Amityville" y de varias películas más.

Dejando aparte esta absoluta falta de innovación, que puede gustar más o menos, "Expediente Warren" es una película que cumple en lo formal, y por lo menos no cae en la trampa del susto fácil en demasiadas ocasiones, algo siempre de agradecer. Las interpretaciones están bien (especialmente la de Vera Famiga, que da vida a Lorraine Warren) y la puesta en escena, ayudada por una muy cuidada fotografía que emula perfectamente el cine de los 70 sin caer en lo empalagoso, ayudan a reforzar una historia bien llevada y sin excesos, sobria y bastante cuidada.

Quizás el pequeño problema de esta cinta sea que, si bien todo es correcto, no pasa de ahí. No cae en el efectismo, pero quizás en ocasiones tendría que haberlo hecho (claro que entonces la estaría criticando por ser demasiado efectista... sí, lo reconozco, soy muy picajoso con el terror). Por ejemplo, en El rito (también basada en hechos reales y que va más o menos de lo mismo) se contaba con una grandísima baza: Anthony Hopkins, un maestro de la pantalla al que le das el peso de una película y lo soporta a la perfección. Aquí... no. Los actores están bien, pero no matan. La dirección es buena, pero no excelente. La banda sonora ambienta, pero no sobresale... y así. James Wan se auto impone una línea, y no se aleja de ella en ningún momento. Es una película que va a tener un taquillaje aceptable porque se ha estrenado en un fin de semana muy parco en estrenos, pero que se llega a estrenar la misma semana que un blockbuster y pasa sin pena ni gloria. Al menos, me ha llamado lo bastante la atención como para comentarla.

Y eso es lo que da de sí "Expediente Warren: The conjuring", película que abusa demasiado de los tópicos para hacernos pasar un rato terrorífico y poco más. Mi puntuación: 5 tirando a 6.

miércoles, 26 de junio de 2013

Gran Hotel



Sí, lo se, se que esto no es lo que critico normalmente, se que este blog no trata de este tipo de productos (aunque esto va a cambiar un poco a partir de ahora), pero es que quería romper una lanza, desde este humilde rincón (y aparte, es mi cumpleaños :P), por uno de los productos nacionales más dignos y redondos que se han hecho jamás: la serie “Gran Hotel”, cuyo fin ya hemos podido ver. Líder de audiencia, y a pesar de todo vapuleada y criticada por muchos por una razón muy sencilla: en España, aparte de despreciar el producto nacional (algo que sufro en mis propias carnes) y ser un país de envidias y cotilleos, muchas veces olvidamos que no se pueden ver todos los productos con la misma actitud. Obviamente, yo no le pido lo mismo a una serie como Gran Hotel que a una como Doctor Who, al igual que no le pido lo mismo a una película como Chocolat que a una como Man of Steel. Son productos distintos (ni mejores, ni peores, sencillamente distintos) y requieren aproximaciones distintas... pero bueno, no me enrollo más y voy al lío.

Es de sobra conocido que en este país no gusta nuestro cine. La inexistente industria del celuloide español ofrece, sin duda, productos de calidad y dignos, pero que no llegan al gran público, en muchas ocasiones por una inexistente promoción que hace que pasen desapercibidos frente a las producciones americanas. Así pues, la televisión parece haberse convertido en la tabla de salvación del profesional del entretenimiento patrio, ofreciéndonos producciones de cada vez más calidad que no tienen nada que envidiar a los productos de, por ejemplo, la BBC (salvando las distancias, obviamente), y son definitivamente mejores que muchas cosas estadounidenses. El hecho de que actores consagrados del panorama nacional no tengan problema en trabajar en este tipo de productos, sin duda, redunda en favor de su calidad final.

Es el caso de Gran Hotel, serie producida por Bambú producciones y emitida por Antena 3, con guión de Ramón Campos y Gema Neira, y dirección principal de Carlos Sedes y Silvia Quer, con varios más. Sus actores principales son la gran Adriana Ozores en el papel de Teresa Alarcón, y los nuevos talentos Yon González como Julio Olmedo y Amaia Salamanca interpretando a Alicia Alarcón, y en su elenco destacan los actores Lluis Homar, Manuel de Blas, el tristemente desaparecido Juan Luis Galiardo y la gran diva de la pantalla Concha Velasco, que nos ofrece una magnífica y genial interpretación como Doña Ángela, gobernanta del Gran Hotel.

El argumento principal de la serie, que mezcla suspense y romance, gira alrededor de una familia acomodada de principios del siglo XX, los Alarcón, compuesta por Doña Teresa (Adriana Ozores), una mujer viuda, y sus hijos Sofía (Luz Valdenebro), Alicia (Amaia Salamanca) y Javier (Eloy Azorín). La fuente principal de su fortuna es un hotel de lujo en el que se hospeda lo más granado de la sociedad de la época, llamado sencillamente el Gran Hotel y situado en el municipio ficticio de Cantaloa, en Cantabria. Al hotel llega Julio Olmedo (Yon González), un joven de origen humilde que investiga la misteriosa desaparición de su hermana Cristina (Paula Prendes), quien sirve como doncella. Este arranque argumental desembocará en numerosas tramas y subtramas protagonizadas por diversos personajes a cual más interesante.

Los protagonistas con el Palacio de la Magdalena
de fondo, que sirve de fachada al Gran Hotel


[Atención: a partir de ahora, será inevitable soltar algunos SPOILERS]

Es difícil destacar algo de una serie de tanta calidad, pero por algún sitio hay que empezar, y como las producciones suelen iniciarse por un guión, comenzaré por ahí: sólido, con numerosas subtramas que se resuelven de forma eficaz y satisfactoria, sin lagunas ni cabos sueltos (ya podría aprender el tan laureado y a mi juicio sobrevalorado J. J. Abrams de Campos y Neira, en serio...) Personajes muy bien hechos, un argumento que no se desvía en ningún momento y los giros argumentales sorprenden y encajan para bien, siguen la línea marcada, algo muy loable en estos tiempos en que las series se hacen con prisas y todo debe ser inmediato y, en ocasiones, chapucero. Por cierto, señor Campos, si usted me lee que sepa que lo que dije en twitter de que Andrés era un personaje “matable” no quería decir que no me gustase el personaje o – como ya menciono más abajo – la interpretación de Llorenç, sencillamente opino que su muerte en aquel momento habría desencadenado numerosas subtramas que habrían desembocado en una cuarta temporada que al final no se realizó... valga decir que en aquel momento estaba leyendo una novela de Canción de Hielo y Fuego (alias Juego de Tronos), y la costumbre de Martin de matar personajes con una facilidad increíble se me había pegado...

En cuanto al trabajo de dirección, impecable en todos sus aspectos. El bello escenario (el Palacio de la Magdalena situado en Santander, aunque los interiores fueron recreados para la serie en un plató de Madrid) es inmejorable, la fotografía y el juego de luces son tremendamente impresionantes, con un verdadero sabor de serie de época, hecho con muy buen gusto y gran amor y cariño al producto que se está tratando y a sus espectadores. Cada fotograma está cuidado al máximo, ofreciéndonos algunas escenas dignas de un cuadro de Sorolla. Y, por supuesto, no puedo dejar de mencionar el increíble vestuario, tanto masculino como – especialmente – femenino, que de verdad consigue trasladarnos a principios del siglo XX y al sentimiento de lujo y opulencia del Gran Hotel. No hay pegas en este sentido, grandísimo trabajo, aunque me consta que las actrices sufrieron mucho con los apretadísimos corsés que se llevaban en aquella época.

Y ahora, procedamos a la parte más visible de toda producción cinematográfica: el trabajo actoral. Gran Hotel, como digo más arriba, tiene grandes personajes que son encarnados por magníficos actores. El reparto es muy amplio, y me disculpo de antemano si a algunos actores no les dedico todo el espacio que merecerían, no obstante intentaré ser lo más amplio posible.

Es de menester empezar por la, sin duda, gran dama de la serie: Concha Velasco. Poco hay que decir de esta magnífica actriz que no se sepa ya, su Doña Ángela, mujer humilde que oculta varios secretos, piensa en el bienestar de su hijo ante todo y acaba convirtiéndose en una gran señora, es sencillamente magistral. Es evidente que una actriz con tantas tablas como ella va a hacer un buen papel, pero realmente se supera a sí misma, ofreciéndonos una interpretación digna de loa que sorprende a cada minuto. Su forma de hacer creíble a su personaje (especialmente la relación con Andrés) roza la perfección, y merece, sin duda, el mayor de los respetos y la ovación más grande.

A su estela sigue otra veterana y magnífica actriz que es Adriana Ozores, que protagoniza la serie encarnando a Dona Teresa Alarcón, personaje ambiguo que se debate entre el bien y el mal (al igual que su hija Sofía, pero eso lo comento más abajo), en un viaje catárquico que la deriva hacia una mayor bondad debido a diversos hechos relacionados con su familia, a reencontrar el amor que creía perdido y a darse cuenta de que muchos a su alrededor no son lo que parecen. Magistral la actuación de Adriana, que demuestra, al igual que Concha Velasco, que tiene tablas para dar y vender, y construye un personaje impecable que pasa de centro de todas las intrigas a víctima parcial de algunas de ellas. Impecable interpretación y genial personaje a la medida de la actriz que lo encarna.

Tenemos en tercer lugar a Yon González, actor joven que interpreta a Julio Olmedo de forma eficaz y pulcra, ofreciéndonos un joven humilde, de provincias y algo inculto en ocasiones. Resulta un hombre duro y acostumbrado a la vida difícil, impulsivo, luchador y heroico. Yon le da un toque eficaz, con mucha fuerza, en general correcto, aunque se le nota la juventud. No obstante, alabo su mejora como actor desde que le vi en El internado, aquí está mil veces mejor (también el papel es totalmente distinto, evidentemente), ofreciendo algunos momentos brillantes, como su buen hacer durante la resurrección de Andrés, y sobre todo mostrando un matiz de “héroe tosco” o de “bueno con matices” que, la verdad, le cuadra muy bien a un personaje como el de Julio. Sigue así, Yon, tienes un gran futuro.

Siguiendo con los papeles protagónicos, por último tenemos a Alicia Alarcón, interpretada por Amaia Salamanca... esta vez, y muy a mi pesar, no voy a ser tan positivo, ya que si bien el personaje tiene posibilidades, la interpretación de Amaia no pasa de correcta, creo que le falta soltarse un poco y ofrecernos algún momento de brillantez. Entiendo que su personaje (una chica comedida, de buenos modales, educada para ser sumisa y casarse por conveniencia) tenga que ser así, y más en la época en que está ambientada, pero... la verdad, podría haber dado más de sí. Por supuesto, con todos mis respetos hacia la actriz, y sin poner en duda ni su calidad como persona ni su indiscutible belleza, creo que le falta el empuje y la fuerza que otros personajes y actores de la serie poseen. Sin duda, aún tiene que llegar su gran momento, Gran Hotel no lo ha sido (al menos para mi), pero estoy seguro que algún día nos sorprenderá, le veo madera para ello. Te lo deseo de corazón, Amaia, y espero que si lees esto no te ofendas por mi opinión.

Las dos grandes damas de la serie, frente a frente.
Obligatorio quitarse el sombrero


Empecemos abordando los secundarios, para mi una de las grandes bazas de la serie, con el ya mencionado Andrés, mejor amigo de Julio e hijo de Doña Ángela, que también trabaja como camarero. Es encarnado por mi paisano Llorenç González, que ofrece un personaje bonachón e inocente, el contrapunto del carácter bravucón de Julio. Posiblemente, uno de los personajes que más evoluciona durante la serie, especialmente cuando se descubre que en realidad es hijo del fallecido patriarca de la familia. Personalmente cogí mucho cariño a este personaje, me sentí identificado con él y creo que Llorenç lo interpreta de forma más que correcta, especialmente la relación con su madre ficticia, Doña Ángela. Ambos forman un tándem que protagoniza una historia de vínculo materno-filial muy bien llevada por ambos y con algunos de los mejores momentos de la serie. Aparte, también protagoniza una de mis secuencias favoritas, la ya mencionada resurrección.

Siguiendo con los personajes masculinos, tenemos a Alfredo Vergara, marido de Sofía Alarcón y marqués, interpretado por Fele Martínez. Personaje muy interesante (uno de mis favoritos junto a Maite y Javier) al ser un “noble noble”, es decir, no solamente es de noble cuna sino que encima es un hombre de honor, algo muy de la época, y no pone en duda la honra de nadie, cegándose ante evidentes actos criminales o inmorales que ocurren a su alrededor. Sin duda, representa muy bien al potentado arquetípico de aquellos años y el buen hacer de Fele, un actor de raza que siempre borda sus papeles (aún le recuerdo en “Tesis” diciendo “Por favor, por favor” con aquella escalofriante voz susurrante), y que en esta serie, como no podía ser menos, está impecable, interpretando a un hombre honorable en medio de un cúmulo de intrigas y traiciones. No puedo dejar de mencionar tampoco el estupendo trabajo de la veterana Kiti Mánver como la marquesa de Vergara, madre de Alfredo, una mujer mucho más espabilada y consciente que su hijo, que le intenta abrir los ojos a toda costa sin acabar nunca de conseguirlo del todo.

El siguiente en la lista de los que aparecen desde el principio (de las incorporaciones de la tercera temporada hablaré más abajo) es el pequeño de la familia Alarcón: Javier. Interpretado por Eloy Azorín, es un personaje ideado para dar el contrapunto cómico a la intensidad y el drama de la serie, resulta el centro de las situaciones más divertidas. Niño mimado, alocado, juerguista y vividor, es un personaje sencillamente genial, y Eloy le da un toque único y memorable, metiéndose en mil y un embrollos. Diría que es el personaje al que más cosas le pasan durante la serie: se enamora de una mujer más mayor (interpretada por la magnífica Silvia Marsó), le mandan al ejército, se casa con... bueno, más abajo comento con quien se casa, que su esposa tiene narices... y recibe montones de bofetadas. En definitiva, un personaje que podría protagonizar una serie de comedia por sí mismo. Con la escena que acaba con la frase: “¡Ese cura es un fenómeno!” me carcajeé como hacía días que no me reía, en mi opinión es la más divertida de toda la serie.

Continuando con los personajes cómicos, tenemos dos muy curiosos: los policías, que se mueven entre la seriedad de ayudar (a veces de forma encubierta) al tándem de investigadores formado por Alicia, Julio y posteriormente, Maite (de nuevo, de quien hablo más abajo) y el humor más absoluto al estilo “pareja de cómicos” como Stan Laurel y Oliver Hardy o Abbot y Costello. Encarnados por el veterano y magnífico actor catalán Pep Anton Muñoz como el inspector Ayala y el divertido Antonio Reyes como el agente Hernando, ofrecen momentos tan divertidos como los de Javier Alarcón, y también serios y dramáticos cuando la ocasión lo requiere (bueno... salvo Hernando, que no deja su papel de personaje cómico nunca). Debatiéndose siempre entre la legalidad y el deber, agitándose entre lo serio y lo divertido, así son estos dos particulares agentes que merecerían una serie para ellos solitos.

Cambiamos de rumbo para analizar a una de las chicas. A las ya mencionadas Adriana, Concha y Amaia se une Luz Valdenebro, que interpreta a Sofía Alarcón, hija mayor de Doña Teresa y esposa de Alfredo Vergara. Personaje ambiguo e interesante, que se debate entre el bien y el mal, es uno de mis favoritos. Personalmente no la calificaría de “mala”, pero sí de egoísta, entendiendo que da más importancia a sus intereses y a los de su familia que a los sentimientos. Casada con un noble, hace y deshace a lo largo de toda la serie, no estando en el centro de ninguna trama pero tocando de refilón muchas de ellas y caminando entre dos y más fuegos. Las estupendas tramas alrededor de Sofía y el esfuerzo de Luz por dar credibilidad a un personaje tan complejo es admirable, personalmente lo considero uno de los más ricos en matices. Por otro lado, el enorme esfuerzo que hace la actriz para camuflar su fuerte acento cordobés y ofrecernos un castellano más cercano al del norte no tiene precio, un aplauso tanto a la actriz como a su personaje.

Y ahora, vamos con el contrapunto de todos los demás: los malos. Como bien menciono más arriba, Teresa Alarcón empieza siendo uno de ellos, y quizás nunca abandona del todo esa actitud, pero el gran malvado de la serie es Diego de Murquía, esposo de Alicia y director y administrador del hotel. Está interpretado por Pedro Alonso, actor a quien sinceramente no conocía, y que construye un malvado a conciencia, del que realmente te llegas a creer que pueda ser así... es la magia de los actores, claro, hacerte creer que son personas totalmente distintas a como en realidad son. Diego es un verdadero bastardo, violento y cruel que se va volviendo progresivamente loco hasta desembocar en la psicopatía más absoluta, pero no por ello un personaje plano, al contrario, está lleno de matices y en ocasiones las pasa canutas, sobre todo en la tercera temporada cuando se descubren algunos secretos sobre su pasado y su verdadera identidad, lo cual es lo que le vuelve definitivamente loco. En definitiva, un trabajo más que digno por parte de Pedro, que sabe sacarle punta a un personaje antipático pero que se nota que se lo ha pasado muy bien interpretándolo.

La otra malvada de la serie es Belén, encarnada por Marta Larralde, actriz no muy conocida pero que como bien dice ella misma ha hecho muchas cosas, especialmente teatro y cortometrajes. Doncella del hotel, esposa de Andrés por pura conveniencia, y una verdadera lagarta que se aprovecha de la extrema bondad de su marido, también pasa por numerosas situaciones (incluyendo perder un hijo y prostituirse) demostrando que su egoísmo y ambición no tienen límites. Un papel codiciado por muchas actrices (que sé que los papeles de malo gustan mucho, aunque como escritor, reconozco que a mi también me encanta crear malos) que Marta encara con mucha profesionalidad, ofreciendo momentos más que dignos y en los que realmente llegas a pensar “menuda perra”, sobre todo cuando ves como le toma el pelo a su marido, que como es todo bondad no se percata de nada, y los duelos interpretativos con Concha Velasco son magistrales. En definitiva, un personaje antagónico tan interesante como Diego, aunque al estar centrado en tramas más secundarias quizás queda algo deslucido en momentos puntuales. Aún así, ninguna queja.

Uno de los momentos cumbre de la serie, Doña Teresa 
fustigando a Belén delante de todo el servicio

El malo de la primera temporada es el primer maitre, Benjamín, interpretado por el estupendo y veterano actor extremeño Manuel de Blas. Un personaje que pasa desapercibido y que oculta un oscuro secreto, ya que es un asesino en serie conocido como “el asesino del cuchillo de oro”, que lleva años matando, algo de lo que nos percatamos con la serie ya bastante avanzada en uno de los giros argumentales más magistrales jamás creados. De Blas construye un psicópata más cercano (afortunadamente) a Hannibal Lecter que a Jason Voorhes, con la sutileza que un papel así requiere. Sus expresiones faciales, gestos y cambios de mirada son increíbles, comparables a los de Hopkins. Personaje con mucha fuerza que encuentra un justo final y que supone un avance de lujo para lo que se avecina.

Como he dicho más arriba, en la tercera temporada se incorporan nuevos personajes, que vienen a dar más interés a los ya establecidos y a añadir mayor riqueza y complejidad a las tramas. Voy a analizarlos:

Empecemos por el nuevo maitre, Jesús Cisneros, interpretado por el veterano actor catalán Lluis Homar, y que es el principal motor de la trama sobre la verdadera identidad de Diego, ya que establece una trama de venganza personal contra él. Personaje ambiguo, que parece tener muy claras las cosas al principio pero que un romance con Doña Teresa hace que sus planes se diluyan, lo cual de paso provoca la evolución tanto de la protagonista de la serie como del propio Cisneros, que acaba volviéndose mucho más humano y menos cruel. Cisneros resulta un “enemigo de mi enemigo” muy atractivo y que sorprende en cada plano, girando el argumento hacia derroteros inesperados, y Homar aporta muchos matices al personaje, tantos como De Blas hace con el suyo, aunque por supuesto no es para menos dada la grandeza de este magnífico actor, que me ha gustado tanto como en “Los Borgia” o incluso más. Poco que decir, sencillamente sin este personaje la tercera temporada no habría sido la misma.

El segundo personaje masculino en ser añadido a la tercera temporada es el Padre Grau, un cura que de beato tiene bien poco, encarnado por el también catalán Roger Coma. Incorporado para desarrollar una nueva trama para Sofía (se hacen amantes... por cierto, ¿por qué todas las escenas de sexo en una iglesia ocurren dentro del confesionario? ¿Qué tendrá ese lugar?), resulta otro personaje ambiguo, que no sabes muy bien por donde va y da pie a alguna que otra sorpresa, y una evolución tanto en el personaje de Sofía (parece que todo es ambigüedad alrededor de este personaje, bien de nuevo por los guionistas) como en el de su marido Alfredo, que acaban afianzando su relación y recuperando la confianza el uno en el otro. Muy correcta interpretación por parte de Coma, en un papel secundario pero importante por su peso en las tramas, y sobre todo por hacer que el interesante personaje de Sofía no decaiga en ningún momento.

La tercera nueva incorporación es Laura, encarnada por la genial, deliciosa y, aparte de actriz, estupenda escritora Marta Hazas (y sí, he leído tu blog y me parece genial, Marta, ¡felicidades!), natural de Santander, por lo me consta que este papel ha supuesto un orgullo para ella. Laura es la esposa de Javier, enfermera y descendiente de una rica familia. Lo que en principio parece un idílico matrimonio por ambas partes (él la ama y su madre, Doña Teresa, la quiere por la dote), acaba convirtiéndose en un divertido infierno cuando se descubre que Laura es una esquizofrénica obsesionada por una muñeca llamada Simoneta, con quien habla como si estuviera viva, y a la que en algunos momentos trata como si fuera su propia hija, lo que genera toda una serie de desternillantes situaciones. Ya conocía a Marta de El Internado, donde interpretaba a Amelia, y la verdad es que tanto en una como en otra serie me parece una genial actriz que encarna a la perfección cualquier registro, mostrándonos aquí su lado más cómico. Su sonrisa pícara y su forma de mirar entre tímida y atrevida, aparte de sus evidentes dotes interpretativas, dan a Laura un matiz extraordinario que creo que pocas actrices habrían podido igualar. Un personaje tragicómico, que divierte y apena a partes iguales, y que trae de cabeza al alocado de Javier, creando situaciones divertidas que de nuevo contribuyen a calmar el tenso ambiente del Gran Hotel. En definitiva, un tándem de tercera temporada que deja un muy buen sabor de boca.

Y quería dejar para el final la cuarta incorporación de la tercera temporada... o lo que es lo mismo, mi gran descubrimiento, sin duda lo mejorcito de la serie: la absolutamente maravillosa, magistral, increíble, inconmensurable, estupenda, brillantísima, genial, preciosa, simpática, dulce, alegre, arrebatadora, y paro de poner adjetivos porque a este paso voy a llenar tres páginas, Megan Montaner. También introducida en la tercera temporada, da vida a Maite Ribelles, mejor amiga de Alicia, abogada (y sí, se que es un fallo histórico que haya una abogada en 1910, pero ahora me vais a decir que en las películas americanas no se toman licencias... ¿o es que “Abraham Lincoln: cazador de vampiros” es una película históricamente fiel?), mujer enérgica, culta y de mundo, un poco el contrapunto de Alicia, e investigadora que se une a la pareja protagonista en sus pesquisas, cada segundo suyo en pantalla y cada plano de sus enormes ojos son un regalo para el espectador. No se me acaban los elogios hacia esta joven actriz, que en pocos meses se ha convertido en mi favorita (¡ha desplazado a Scarlett Johanson del primer puesto de mi lista personal!), y me quedaré corto al elogiarla, su talento, esfuerzo y trabajo desde el principio hasta el fin es digno de loa. Sin duda, está destinada a convertirse en una gran dama de la pantalla, no puede ser de otra forma, derrocha esmero y encanto por todos lados (aparte de ser bellísima, a la vista está). Megan, ojalá leas esto algún día: te has ganado un lugar en mi corazón, prometo que veré todas tus series en la tele, iré a ver todas tus películas al cine (porque vas a hacer muchas películas, seguro) solo porque las haces tú... y yo nunca me muevo por actores, siempre lo hago por temáticas. Y además, las criticaré aquí, prometo intentar ser neutro, aunque contigo me es casi imposible. De verdad, estoy deseando ver todos tus próximos trabajos, ya sea en la pequeña, la gran pantalla o el teatro... ¡y si algún día se hace una película de uno de mis libros la protagonizarás tú, prometido! (bueno, esto... si la productora quiere, claro... pero tú confía en mi...). Y además, paisana de mi madre, ¿qué mas se puede pedir? ¡Viva San Lorenzo y viva Huesca!. No mereces menos, gracias por el regalo que ha supuesto Maite... que, por supuesto, y no podía ser de otra forma, se ha convertido en mi personaje favorito, y su final es precioso. Por cierto, que esta señorita habría ofrecido una Lois Lane mil veces mejor que Amy Adams... por lo menos, ¡mucho menos sosa!. Directores de casting de Man of Steel, ¿por qué no se os ocurrió venir a España? (para encontrar lógica a estos últimos comentarios, os remito a mi crítica anterior: http://criticasmuyconstructivas.blogspot.com.es/2013/06/el-hombre-de-acero_22.html ).

Me perdería durante horas en esos ojazos... 
Cortesía de MizonaTV

Por supuesto, los actores principales y secundarios no serían nada sin todo lo demás, y en este caso los actores de reparto (que no puedo dejar de mencionar, o si no Raquel Sierra me viene a buscar a mi casa...) y la figuración es tan genial como todo lo demás. Por supuesto, magníficamente caracterizados y muy correctos cada uno en sus papeles, demostrando esos modales contenidos que todos los mayordomos y criados de la época poseían, y cotilleando a escondidas cuando nadie (salvo Doña Ángela, por supuesto) puede oírles. Como homenaje a todos, y sintiendo no poder reservarles el espacio que dedico a los actores principales, voy a destacar dos escenas que me encantaron, una en la que el recepcionista del hotel, interpretado por el actor de reparto Dion Córdoba, es “pillado” fumando y bebiendo en el despacho de Diego porque este le ha dicho que lo ocupe para despistar a los demás, y el interrogatorio que mi adorada Maite realiza al servicio (creo que es la vez que más la llaman “señorita” en toda la serie...) a propósito de la desaparición de Alicia, donde mantiene un interesante diálogo con Natalia, interpretada por la ya mencionada actris de reparto Raquel Sierra. Quizás no parezca tan relevante como el metraje principal, pero por supuesto tiene su importancia y no puedo dejar de mencionar mi respeto y admiración por todos esos pequeños momentos que los extras y figurantes ofrecen en esta serie. ¡Felicidades!.

Y por último, aunque no menos importante, la música de Federico Jusid, magistral, con temas ambientales apropiados para la serie de la que se trata. La música de piano de los créditos es muy bonita, y en general todos los temas ayudan a crear ambiente tanto como la iluminación y puesta en escena, ya sea en las escenas románticas, de suspense o de acción. Estas últimas, sobre todo, destacan por su intensidad. Mi única “pega” en este sentido es que mi tema favorito es... ¡el de las cuñas publicitarias, que (creo) nunca se usa en la serie!. Pero vamos, que tan redonda como todo lo demás, felicidades para Federico.

En definitiva, serie que recomiendo a todo el mundo, el mejor producto nacional que he visto nunca. De verdad, aunque no os gusten las series españolas, dadle una oportunidad. ¡Un diez para todo el equipo, podéis sentiros orgullosos, felicidades!. Ojalá solo sea la punta de lanza, y otras producciones sigan su estela... qué ganas de tener la tercera temporada en DVD, de verdad (las otras dos ya las tengo, que conste).

¡Anda, un infiltrado! Pues no, soy yo con las dos primeras termporadas de Gran Hotel.
¡A ver si algún día me las firma alguno de los actores!


EDITO: objetivo conseguido!!!! Me firmaron en Tarazona Dani Pérez Prada, Fele Martínez... ¡y Megan Montaner!!! Os dejo una foto en detalle de su dedicatoria. ¡Muchas gracias, Megan!

Este es el artículo más largo que he escrito hasta la fecha... espero no haberos aburrido, aunque si estáis leyendo esto es que como mínimo habéis llegado al final. Gracias por aguantarme, y hasta la próxima.

PD: Tiene su aquel escribir una crítica pensando en la posibilidad de que la lea parte del equipo de la serie... aunque espero que Amaia no mande un asesino a sueldo a mi casa...

sábado, 22 de junio de 2013

El hombre de acero



Se nos vuelve a narrar la historia de siempre: un niño alienígena es salvado por sus padres de la destrucción de su planeta, Krypton, enviándolo a la Tierra, y una vez aquí descubre que posee grandes poderes que debe ocultar hasta que el mundo esté preparado para descubrirlos, acabando por convertirse en el mayor superhéroe de todos: Superman.

Y por fin llegó, el héroe más famoso de todos ha aterrizado de nuevo en nuestras pantallas. Un reboot necesario y esperado, tras el fiasco que supuso Superman Returns (que a mi personalmente no me disgustó, pero bueno, son opiniones...) ¿Y qué nos ofrece este nuevo Superman? Pues muchas cosas que paso a desgranar, como siempre sin spoilear o spoileando lo mínimo... Valga decir que voy a intentar evitar las siempre odiosas comparaciones y centrarme en este filme, olvidando un poco las anteriores entregas del personaje. Es un Superman nuevo, y se merece una nueva aproximación.

Para empezar, la mano de Christopher Nolan y David S. Goyer se nota, el guión está bien hecho, con momentos muy emotivos (sobre todo al principio), y que construye una historia más sólida que sus predecesoras. Aquí Zod no es malo "porque sí", los secundarios juegan un papel muy importante (especialmente Jor-El, su padre biológico, interpretado por Russell Crowe) y la destrucción de Krypton no es algo que ocurra "al azar" sino que tiene toda una trama a su alrededor, explican mucho mejor este tema, lo que implica que el principio en el planeta condenado es mucho más largo que el simple lanzamiento de la nave de Superman. La infancia y adolescencia del héroe, con sus problemas de adaptación, se nos ofrece en flashbacks. Muy importante la intervención de Jonathan Kent (Kevin Costner) en dichos flashbacks. Y tras esto, la recta final que supone un cambio de ritmo total, precipitándose en un espectáculo de acción y efectos visuales continuos, dignos del mejor Zack Snyder, que sabe imprimir a las escenas de movimiento un ritmo trepidante. Aquí, al contrario que en otras producciones, el director no hace uso de la cámara lenta, sino todo lo contrario, el desenlace hasta el final es frenético y no deja un minuto de respiro.

En cuanto al trabajo actoral, Henry Cavill nos ofrece un Superman convincente, incluso brillante en ciertos momentos, mucho más salvaje y primario que sus antecesores, se nota que intenta mostrarnos un superhéroe primerizo, sin experiencia. Diane Lane como Martha Kent está estupenda, y la interpretación de Kevin Costner es para quitarse el sombrero, su Jonathan actuando como conciencia de su hijo es impecable. Por otro lado, Lawrence Fishburne me ha sorprendido agradablemente, antes de ir a ver la película no me convencía que hagan a Perry White negro, pero reconozco que nos ofrece un personaje muy humano y consciente, con un momento muy brillante que no voy a desvelar. Michael Shannon como Zod ofrece un villano a mi juicio más que convincente, que se debate entre el honor y la locura, intentando siempre justificar sus acciones incluso ante sí mismo, y evolucionando hacia la psicopatía al final. No obstante, sin duda, el que se lleva la palma es Russell Crowe. Su Jor-El es lo mejor de la película, emotivo, brillante y arrebatador, ofreciéndonos una interpretación sólida e indiscutiblemente genial.

Y ahora, voy a comentar el único punto que no me ha gustado demasiado de la película: Amy Adams. Sinceramente, no conocía a esta actriz, y la verdad su Lois Lane me ha parecido algo floja, sosa y con poca fuerza interpretativa. A ver, no es que haga un mal papel, pero no pasa de correcto al lado de los demás actores, que a mi juicio ofrecen interpretaciones claramente superiores a la suya. Reconozco, eso sí, que la historia de amor entre Superman y Lois está bien llevada, de forma bastante madura, aquí ya no es "me enamoro de ti porque estás buenísimo y eres un superhéroe megaguay", sino que hay toda una trama detrás antes de llegar a eso.

Y ahora, abordemos los aspectos técnicos. Los efectos visuales son de quitarse el sombrero, la batalla (porque eso es algo más que una pelea...) de la última parte de la película es sencillamente alucinante, con explosiones y espectáculo por todas partes, pero también el principio te deja sin aliento, pues la representación de Krypton, claramente inspirada en el cómic "Mundo de Krypton" es magistral, y sobre todo tiene mucha más importancia que en otras películas del héroe. En resumen, en este sentido a la película no se le puede achacar ningún defecto, es 100% disfrutable de principio a fin.

En cuanto a la banda sonora de Hans Zimmer, se que a muchos les cuesta olvidar la famosa tonadilla de Williams pero a mí personalmente me ha encantado. Está llena de fuerza, de acordes rompedores que van a la perfección con las escenas de acción, pero a la vez de momentos tranquilos para la parte intimista de la historia. De hecho, he salido del cine tarareándola, no os digo más... A mi juicio, a los diez minutos ya te has olvidado del famoso "Superman Theme", la música tiene una fuerza tan arrebatadora que no queda otra opción.

En resúmen: impecable en todos sus aspectos, la mejor película de Superman (que no de superhéroes, ya que en ese podio está la trilogía de Batman) que he visto nunca. Le doy un 8 tranquilamente, y la recomiendo encarecidamente.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Iron Man 3

En esta tercera parte se cierra el círculo argumental iniciado en Iron Man. Un Tony Stark traumatizado por su lucha con los Vengadores debe enfrentarse a la organización terrorista Diez Anillos y a su líder, el diabólico Mandarín.

Llega la primera película de ese gran plan de Marvel por hacer films de todos sus personajes, en una macrofranquicia multimillonaria. ¿Y cual es mi opinión? Sinceramente... que no hay vida después de Avengers. A ver, no es una mala película, para nada, resulta entretenida y divertida, pero me ha dejado la sensación de que le falta algo. Concretamente, frescura. Me ha parecido más que lo mismo, me ha dado la sensación de que Jon Favreau (quien, por cierto, se reserva un papel secundario) exprime el argumento tanto que se está quedando sin ideas. El problema de la fórmula del "héroe con problemas" de Marvel es que el héroe tiene que tener algún foco para su problema. En el cómic, siempre ha sido el alcoholismo. En la película, quitan ese problema en la primera película (un alcohólico no es algo políticamente correcto en la América actual), así que tienen que sustituirlo por algo, en este caso un síndrome de ansiedad.

Pero bueno, vamos con los aspectos positivos. Es mejor que la 2. Bastante mejor. A ver, no es muy difícil porque la 2 a mi juicio es algo floja - posiblemente, una de las películas más flojas de Marvel - pero la verdad es que le da mil vueltas, sobre todo argumentalmente hablando. El tema del Mandarín está muy bien resuelto, con giro argumental y semisorpresa final. Introducen además a IMA (una organización Marvel de científicos malvados) de forma muy eficaz. Por supuesto, los efectos especiales y diseño de personajes, especialmente de las armaduras, son para quitar el aliento. La parte final, que no voy a desvelar - y que creo que está sacada de la saga Armor Wars, pero no estoy seguro ya que no soy un gran seguidor de Iron Man -, me ha encantado.

Ahora, los negativos. Como digo, me ha parecido un refrito. Sobre todo, un refrito de Avengers (de imprescindible visionado, por cierto, para enterarte de algunas cosas, especialmente ciertos diálogos). Por otro lado, la trama de IMA y el Mandarín, aunque bien hecha, me ha parecido un tanto demasiado enrevesada (y, creo, no se corresponde para nada con el cómic). Pero lo más importante: en esta película se pierde en parte el humor que caracterizó a las otras entregas, y también a Avengers. Aquí Stark es más serio y "maduro", sí, pero menos divertido. Para paliar este efecto, hacen a uno de los malos (no voy a decir cual por no spoilear) gracioso... algo que me ha parecido un error, pese a lo bien hecho que está. Error porque deja al villano por los suelos y, por lo que he leído, lo aleja demasiado de su versión comiquera (no me parece mal en el Joker, por ejemplo). Aparte, he notado a Robert Downey Jr. algo agobiadillo, se le nota un poco que empieza a estar hastiado de Iron Man (ha dicho que tras Avengers 2 no lo interpretará más). Personalmente, preferiría que dejasen Iron Man en trilogía, no me parece que tras esta tercera parte puedan continuarla de forma coherente por diversas razones, especialmente porque se enfrenta al Mandarín, su archienemigo comiquero. No obstante, mientras funcione, habrá más Iron Mans, seguro.

Por otro lado, la banda sonora me ha parecido algo floja, y demasiado parecido a la de Avengers, parecen los mismos acordes resampleados... ¿la de la primera parte era así? No lo recuerdo, pero diría que era algo mejor...

En fin, pues eso es lo que da de sí la última entrega del acorazado de Marvel. Recomendable con reservas, a mi juicio. Le doy un 4 raspado.

jueves, 28 de marzo de 2013

G. I. Joe: La venganza

Tras los hechos ocurridos en G. I. Joe, el Comandante Cobra es liberado por sus agentes, y los G. I. Joe declarados proscritos gracias al infiltrado de Cobra en el gobierno. Solamente un puñado de valientes Joes quedarán para hacer frente a la amenaza de Cobra, los cuales contarán con la ayuda del general Joe Colton, el antiguo fundador de los G. I. Joe.

Bueno, esta es la típica peli que va a ser brutalmente destripada hasta la saciedad por los críticos, es lo que tiene hacer "mal cine", claro, así que voy a intentar hacer una crítica que sea un poco el contrapunto de todas las que ya están, están por venir y seguro vendrán. Atención, esta crítica, al contrario que las que suelo hacer, contiene SPOILERS pero de la primera parte.

Reconozco que, en su momento, G. I. Joe me sorprendió. Que se maltratase de esta forma a una producción sobre mis juguetes favoritos de crío, con continuos recortes de presupuesto, fuertes discusiones entre el equipo y un Sommers entre dos fuegos continuamente cabreado con los productores para, finalmente, sacar una película tan digna y que superaba con creces al otro "gran estreno de acción" del verano (Transformers 2) me pareció agradablemente sorprendente. Por supuesto, era una película ligeramente modesta (no había estrellas, los efectos especiales no pasaban de decentes, etc), pero me gustó bastante como conjugaron las historias personales de los personajes con la trama principal, especialmente el curioso triángulo entre Duke, la Baronesa y el Comandante Cobra, y el enfrentamiento entre los ninjas Snake Eyes y Storm Shadow.

Ahora, nos llega la segunda parte con bastante retraso (enseguida explico por qué). Ante todo, decir que esta es la continuación directa de la anterior, es decir, si no has visto G. I. Joe, no vayas a verla porque te vas a perder parte del argumento. ¿Y qué han hecho? Dedicarle algo más de presupuesto, lo que se nota en el hecho de que haya dos blockbusters como el luchador de wrestling The Rock y Bruce Willis. La película mantiene la misma línea que la primera, es decir conjugar acción principal con escenas personales, aunque se le dedica más tiempo a Cobra y a explicar como funciona (ya no es MARS, evidentemente). La mayoría de personajes de la anterior película desaparecen, de los G. I. Joe solamente se conserva a Snake Eyes y de Cobra, el Comandante, Storm Shadow y Zartan.

Bien, empezaré con los fallos. Para empezar, eso que ha provocado el retraso de 9 meses: el 3D. ¿Y por que es un fallo? Porque esta mal hecho, aparte de hacer una fuerte campaña publicitaria (incluyendo anuncio en el descanso de la Super Bowl) y retrasar la película sólo para incluir el 3D. El problema es que, como la película no estaba rodada para ser vista en 3D, no contiene escenas donde realmente el 3D pueda impactar, solamente una o dos. Me recuerda a una peli de baile que no he visto y cuyo título no recuerdo, que fue estrenada en 3D sólo porque estaba de moda el sistema. Pero, realmente, en esta ocasión el 3D no aporta nada y encima está metido algo burdamente, de forma que algunas escenas sueltas se ven dobles. En resumen, la película no gana nada en 3D, se puede ver en 2D perfectamente.

Otra cosa que no me ha gustado es que se elimine al personaje de Duke de la forma en que se hace. A ver, entiendo que, si tienes a una megaestrella como The Rock, que ha cobrado su correspondiente megasueldazo, prefieras que sea el protagonista en lugar de un actor solo medio famoso y que, seguramente, habrá cobrado mucho menos, aunque... no se, se podrían haber currado un poco más su desaparición de la trama, la verdad. Igual que no entiendo la decisión de hacer desaparecer a Destro, supongo que Eccleston no querría seguir y no habrán querido sustituirlo (el Comandante Cobra sí que ha sido sustituido, aunque no olvidemos que este personaje es como Darth Vader, es decir lleva un casco, por lo que puedes poner dentro al actor que te de la gana).

Vamos con los aspectos positivos. Para empezar, que haya más actores famosos le da a la película un toque que la otra no tenía. Es evidente que tener a dos pesos pesados de la acción le va a dar más encanto, y así se demuestra en sus actuaciones. Ojo, tampoco es que reciten a Shakespeare, evidentemente, pero hablamos de cine de acción, y en el cine de acción contratas estrellas de la acción, ¿no?. De la misma forma que no veo a The Rock en una peli de Woody Allen, tampoco veo a Woody Allen en... bueno, en G. I. Joe, por ejemplo. Tanto uno como cumplen sobradamente con sus papeles asignados, y el resto del reparto tampoco le va a la zaga, con actuaciones sencillas pero eficaces, como demanda una película de este tipo.

Otro punto positivo son las ya mencionadas historias paralelas, una de las cuales gira alrededor de Duke, y la otra, como siempre, son los asuntos de los ninjas. Sin duda, Snake Eyes es el personaje estrella de las películas (también era el más "molón" en los 80, no olvidemos que por entonces los ninjas estaban muy de moda), y desde luego Ray Park se perfila como el actor perfecto. De nuevo, no recita a Shakespeare (de hecho, no dice NADA en ninguna de las dos películas), pero su forma física y conocimientos de artes marciales hacen que este papel le quede como un guante.

Más detalles. La película es más "realista" que su primera parte. Con esto no quiero decir que hayan hecho un documental sobre la vida militar o la guerra de Afganistan, evidentemente, sino que hay menos elementos de ciencia ficción. Las armas no disparan rayos, y los vehículos tienen un aspecto algo más realista que los de la primera peli (incluso sale el Serpitanque, vehículo estándar de Cobra que salía en dibujos y cómics y que nunca llegó a España para frustración de los fans de los juguetes). De hecho, aquí sustituyen la ciencia ficción por el cine de espías, creando una curiosa analogía con Misión Imposible 4, la trilogía Bourne y algunas películas de James Bond (Licencia para matar, por ejemplo). No es que conviertan G. I. Joe en una película de espías, pero han cogido elementos de estas, en una combinación curiosa, pero que la verdad funciona muy bien.

También los efectos especiales se han mejorado algo, de nuevo - imagino - debido al hecho de haber invertido más dinero en la película. Aquí se destruye mucho más, las explosiones son mucho más bestias y todo es algo más grandilocuente, aunque sin perder el tono relativamente "sobrio" y militar. Quizás he echado de menos una macrobatalla al estilo del final de la primera parte, pero imagino que las críticas negativas de "mala copia de Star Wars" calaron hondo en Paramount y han decidido evitarlas. Aún así, el final es bastante apoteósico, con humorada final de The Rock incluida.

En cuanto a la decisión de sustituir tantos personajes de un plumazo, pues imagino que se debe a la presión de Hasbro de vender muñequitos nuevos. De hecho, hacen ligeros cambios en el uniforme de Snake Eyes, el  diseño del Comandante Cobra es nuevo, etc, así que ya sabemos por donde van los tiros. O, a lo mejor, quieren conservar el tono de los cómics o la serie de animación, donde los protagonistas eran grupos de tres o cuatro Joes que se iban mostrando en cada episodio/número (de nuevo, una maniobra impuesta por Hasbro para ir vendiendo los muñecos poco a poco, no olvidemos que los 80 fueron la época de "apoyo los juguetes con un trasfondo ofrecido a través de cómics, dibujos, etc"). Lo que realmente me encantaría es ver la fabulosa intro de la película ochentera en imagen real, o al menos su música adaptada, ya que entiendo que una escena como esta necesitaría extras a puñados (en animación es más fácil de hacer, claro, lo hacen dos o tres dibujantes).

En resumen, película ligera, que se ve bien, se paladea mejor y se digiere aún más fácilmente. Ya estoy esperando la segura tercera parte. YO JOE!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

lunes, 18 de marzo de 2013

Reflexión: El Batman de Christopher Nolan




Bien, la trilogía de Batman se cerró en verano, y ahora que ha salido la tercera parte en DVD he tenido la oportunidad de ver las tres películas seguidas, algo que no había podido hacer hasta ahora. Voy a analizar el producto en conjunto, tomando en cuenta consideraciones como el impacto que ha tenido en el cine actual o su taquillaje.

Aviso, el siguiente texto puede contener, y seguramente contendrá SPOILERS

NOTA: A partir de ahora, para no repetir todo el rato “Trilogía de Batman”, “nuevas de Batman”, etc, la resumiré en las siglas TBN, es decir Trilogía de Batman de Nolan.

Diferencias entre la trilogía de Nolan y el resto de películas de superhéroes

Mucho se ha hablado de la calidad de TBN, y sobre todo de lo diferentes que son de otras películas de superhéroes, pero no se ha ahondado en esas diferencias, quizás porque los que afirmábamos esto eramos fans de los cómics y obviábamos cosas que aquel que no ha leído nunca un cómic no puede ver por desconocimiento del medio. Voy a enumerar las, a mi juicio, grandes diferencias entre esta trilogía y el resto de filmes de superhéroes:

Para empezar, la más importante de todas: mientras que en el resto de películas de superhéroes, el argumento está supeditado a los personajes (en especial, al protagonista y al antagonista), en TBN ocurre justo lo contrario, los personajes están supeditados al argumento. Las películas (las tres y en conjunto) tienen una trama sólida y bien definida que da un paso más allá (junto a, posiblemente, Watchmen) de lo que es el típico filme de superhéroes, alejándose del argumento lineal de “el héroe atrapa al malo”. Esto las hace más cinematográficas, lo que permite que el mensaje pueda llegar más fácilmente al espectador medio.

¿Se puede hacer esto con el resto de superhéroes? Posiblemente, el problema es que Batman tiene la virtud (ajena al personaje) de haber sido siempre el “niño mimado” de DC Cómics. Siempre se le han adjudicado equipos artísticos de primer orden, lo que ha hecho que se haya beneficiado de unos excelentes guiones y dibujos. Esto le ha conferido un universo muy rico y, sobre todo, bien cohesionado, que permite crear una historia a su alrededor que puede entenderse a muchos niveles. Si hay otros personajes con la misma virtud (posiblemente, los X-Men si tomamos como referencia la etapa de Chris Claremont, por ejemplo), se puede construir una historia alrededor de ellos parecida a TBN. ¿Por qué no se ha hecho? Esto lo aclaro en el siguiente punto.

El segundo punto sería que se huye del esperpento. Hay un concepto curioso en el cine de superhéroes, y es que en su mayoría está creado para ir dirigido a niños o adolescentes. Al parecer, las historias maduras y oscuras no triunfan cuando son llevadas a la gran pantalla, como demuestran Daredevil y Watchmen, películas que fracasaron en taquilla en parte porque la gente no las entendía. Debido a ello, se apuesta por el argumento simple y ligeramente esperpéntico, típico de los cómics. Hay cientos de ejemplos, Vengadores sin ir más lejos es así.

Sin embargo, Christopher Nolan, Jonathan Nolan y David S. Goyer apostaron por un tono adulto, maduro y oscuro, retirando del guión de la TBN todo viso de esperpento y de simpleza argumental. Las razones de tan acertada decisión se me escapan, pero puedo intuirlas: hacía tiempo que el cine le debía algo a Batman, el lógico fracaso de las dos últimas partes, las de Joel Schumacher, en las que el personaje tocó fondo y se convirtió en el ejemplo descarnado del esperpento más absoluto, superando con creces cualquier otra película de superhéroes hecha anterior o posteriormente (quizás con la excepción de Catwoman), hacían casi imprescindible un retorno a la gran pantalla distinto, otra aproximación. Como digo más arriba, la extensa biblografía comiquera de Batman (y de otros personajes, valga decirlo) hacen esto posible.

Dicotomía del heroísmo

A esta riqueza argumental comentada más arriba y esta solidez de guión se suma el hecho de que la TBN hace un análisis del heroísmo en su forma más pura. Batman se nos presenta aquí como una persona con unas claras motivaciones, mucho mejor explicadas y más sólidas que en el Batman de Tim Burton, donde el asesinato de sus padres apenas se menciona y se ve de soslayo. Por otro lado, esta trilogía ofrece algo insólito hasta ahora: un héroe con fecha de caducidad. Bruce Wayne entiende que Batman solamente es un instrumento, una forma de que sus seres queridos no sufran y a la vez de convertirse en una leyenda, un símbolo de terror para los delincuentes. También se introduce un concepto que en otras películas del género no está presente: no todo gira alrededor de Batman, él es el elemento más sobresaliente en una compleja red de personajes y situaciones. Tan importante como Batman es Bruce Wayne, incluso más si es posible. Los secundarios, tanto los que ayudan como los que luchan contra Batman, adquieren una importancia inusitada en este tipo de filmes: el comisario Gordon, esencial en la trama, el mayordomo Alfred, que aquí aparece como contrapunto moral del protagonista, Lucius Fox, quien no solamente crea los cachivaches sino que es un referente moral para Batman, sobre todo en la segunda película, y sobre todo los villanos: los gángsters de Gotham, Ra's Al Ghul, el Espantapájaros (único villano que aparece en las tres películas), Joker, Harvey Dent/Dos Caras, posiblemente el personaje antagónico con más peso en la trama a pesar de salir solamente en la segunda, Bane y Talia. Todos ellos ofrecen una aproximación al villano diferente, desde el frío y calculador hasta el demente que actúa por instinto. También hacen que Batman se deba enfrentar a ellos de forma diferente, mostrando las diversas facetas del héroe.

Sin embargo, lo que hace que esta trilogía sea diferente es la forma en que al espectador se le muestra el heroísmo. Batman es un hombre normal que tiene que hacer cosas anormales, es una persona abnegada y sacrificada que quiere evitar que la gente sufra. Para ello, utilizará cualquier método a su alcance mientras no tenga que matar. Su ciudad, Gotham, está corrupta y él va a limpiarla. Si para ello tiene que hacer cosas fuera de la ley, las hará, porque así es su ciudad. Está dispuesto a sacrificar su vida si es necesario, pero también algo más: su integridad, su buen nombre, su honor. Esto se demuestra especialmente en el memorable final de El Caballero Oscuro (a mi juicio, uno de los mejores, si no el mejor, final de la historia del cine, se me ponen los pelos de punta y se me saltan las lágrimas cada vez que lo veo), en las frases: “soy lo que Gotham necesite que sea”, y “Porque eso es lo que tiene que ocurrir. Porque a veces la verdad no es suficiente. A veces la gente se merece algo más. A veces la gente se merece una recompensa por tener fe. ”. Si la gente tiene que pensar de él que es un villano y un asesino, está dispuesto a asumirlo sin dudar. Y lo que demuestra que Batman no es un hombre normal es la frase final de esa película, dicha por el comisario Gordon: “Él es héroe que Gotham se merece, pero no el que necesita ahora mismo. Así que lo perseguiremos porque él puede resistirlo. Porque no es un héroe, es un guardian silencioso. Un protector vigilante. Un caballero oscuro.” Él puede resistirlo. Si ha podido enfrentarse a malvados, gente poderosa, mafiosos, miembros de bandas y del crimen organizado, si es alguien tan duro como para aguantar esto, puede aguantar que la policía vaya tras él. Esto es muy importante, es heroísmo mucho más allá de llevar una capa o erigirse en el salvador de la humanidad. Lo que distingue un héroe de una persona normal es su capacidad de sacrificio, no de triunfo. Su disposición a aceptar la derrota, no la victoria. En este sentido, Batman se nos muestra como un héroe absoluto, lo sacrifica todo, solamente le queda dar su vida por los demás, y si hubiera tenido que hacerlo lo habría hecho.

Trilogía auténtica

Esto es una gran novedad, y que marca otra gran diferencia con respecto a otras películas del género: es una historia cerrada, ya planeada así desde el principio. Al contrario que los cómics, las películas de Batman tienen un final, una conclusión. Bruce Wayne se hastía de su continua lucha contra el crimen, le pasa el testigo a otro y se marcha de la ciudad. Está cansado, con una lesión en la pierna y ha encontrado una mujer que le llena. ¿Para qué continuar siendo un héroe? Su trabajo ha servido de inspiración a otros, hay alguien que va a continuar su tarea, por lo que él puede retirarse, irse del antiguo pozo de perdición en el que ha hecho renacer la esperanza. Es algo que en el cómic no puede hacerse porque son medios diferentes, y mientras un personaje venda hay que mantenerle vivo, pero el cine es un medio mucho más efímero, y la gente está acostumbrada a que las historias sean cerradas, tengan un fin. El espectador se cansa mucho antes que el lector de cómics de las cosas, por lo que los Nolan y Goyer vieron en esta trilogía la oportunidad de hacer un Batman adaptado al cine, entendible, y con una historia autoconclusiva que no dejase cabos sueltos. Esta, y no otra es la gran virtud de la TBN.

domingo, 17 de marzo de 2013

Jack el cazagigantes

Un antiguo cuento dice que unos gigantes asolaron la Tierra en el pasado bajando por unas plantas de judía mágicas gigantes desde su ciudad en las nubes. Ahora, esas judías son replantadas de nuevo por error, y los gigantes bajan de nuevo gracias a un pequeño complot urdido por un usurpador al trono. Un campesino llamado Jack y la princesa del reino se verán obligados a detener este desaguisado que podría destruir el país.

Adaptación del cuento "Las habichuelas mágicas", anónimo aunque atribuido erroneamente a Hans Christian Andersen. Como la película no me ha gustado demasiado, voy a intentar ser lo menos destructivo posible.

¿Las partes positivas? Es realmente un cuento, narrado como tal y con la estructura de uno, han intentado realmente captar ese ambiente de cuento de hadas tanto en los diálogos como en la puesta en escena. La época es algo a caballo entre el medievo y el renacimiento, con toques fantásticos (aparte de los gigantes), y en general está muy bien creada. El país de las nubes de los gigantes, por su parte, no le tiene nada que envidiar, está muy bien hecho. En resumen, la puesta en escena es algo más que decente, rayando en lo impecable. Por otro lado, Ewan McGregor, que se nota que se lo pasó muy bien haciendo esta película, aporta solidez y un papel de héroe secundario bien construido (dentro de la simpleza argumental que requiere una historia para niños) al que no se le puede achacar ningún defecto. La introducción animada, por su parte, donde te cuentan la leyenda de los gigantes, está bien hecha y bien llevada. La historia es lo bastante simple como para ser entendida por un niño, aunque quizás demasiado para un adulto (en comparación con, por ejemplo, Toy Story).

Ahora, las partes negativas. Todo el talento derrochado en los escenarios muere al ver los efectos especiales. Los gigantes se ven puro ordenador, más falsos que un billete de 7 €. No llegan a dar el pego, y aparte parecen calcomanías de los trolls de ESDLA, especialmente el ettin (el líder de dos cabezas), ya que una de sus cabezas es igualita a la de Gollum. Quizás el único gigante que se salve sea el cocinero, que protagoniza una de las escenas más divertidas (y asquerosillas) de la película. Supongo que hicieron esto para que no diera tanto miedo a los críos, pero se pueden hacer cosas no terroríficas con buenos efectos especiales (Toy Story, Cars, Star Wars y un largo etcétera). En resumen, los gigantes no convencen y menos cuando interactúan con humanos. La judía mágica tampoco es que se luzca demasiado, se ve bastante artificial y poco trabajada, parece que no han querido invertir demasiado en efectos especiales.

Por otro lado, la película comete un grave error en un filme de estas características: tiene trozos lentos. El principio y el final tienen un ritmo apropiado, pero por el medio ocurren cosas lentas y algo chapuceras. A mí personalmente se me hizo mucho más pesada que El Hobbit... ¡y dura la mitad!. Entiendo que un drama sea lento, pero ¿una película infantil? Lo que quiere un crío es estar distraído, no ver como la princesita se enamora del campesinito. Que por cierto, y aquí espero que me perdonéis el machismo, para princesa podrían haber elegido una actriz más lucida, porque Eleanor Tomlinson no es que esté muy allá (por lo menos en la peli), al menos podrían haber puesto a Miley Cyrus o alguien así, que han sido estrellas infantiles y están de mejor ver, habrían alegrado un poco la vista a los padres que tienen que soportar el soporífero nudo (las madres ya se la alegran con McGregor y Nicholas Hoult, el prota). Jolín, si hasta la mayoría de mis amigas que no son actrices famosas (evidentemente) son más guapas que la Tomlinson, a ver, no pido que vaya medio en pelotas, pero sí que salga medianamente atractiva. Veo en la wikipedia que tiene 20 años... pues como será cuando tenga 30, porque la pobre está hecha polvo...

Por cierto, acabo de leer que la dirige nada menos que Bryan Singer... pues se ha lucido el colega, pasar de X Men 1 y 2 y Superman Returns a esto, tiene narices... como puede degradarse la carrera de según que directores, de verdad...

Por cierto, ni se os ocurra pagar por verla en 3D (yo no lo hice), es tirar el dinero. A ver, no dudo que algunas imágenes (sobre todo las del final) se vean mejor en 3D, pero considerando la parte del medio, ver esas escenas que no aportan nada y encima son aburridas en 3D...

En resumen, película recomendable sólo por su paisajismo, y definitivamente, para ir a verla con niños, en caso contrario es tirar el dinero. Poco más puedo decir de Jack el cazagigantes, film para ver y olvidar, o directamente para no ver. No vas a perderte nada.