Un cura y una novicia con poderes psíquicos son enviadas a una antigua abadía rumana en la que se están produciendo extraños sucesos paranormales.
Llega un nuevo spin off de "Expediente Warren", esa saga de películas basada en los archivos (supuestamente) reales de los Warren, dos parapsicólogos estadounidenses. ¿Y qué podemos esperar de esta nueva entrega? Pues por el lado positivo, buenas interpretaciones, una atmósfera bien conseguida y una banda sonora que acompaña a las terroríficas imágenes, preparando al espectador para esos sustos que uno espera de una película de terror.
Por el lado negativo... exactamente, lo mismo. Buenas interpretaciones, pero no extraordinarias. Una atmósfera bien conseguida, pero no del todo inmersiva. Unos sustos bien hechos, pero en ocasiones predecibles. En especial, la última parte, cuando ya se ha descubierto todo el pastel, y pese a tener un par de toques a lo Silent Hill que le dan algo más de atractivo, me ha parecido en exceso predecible, le falta algo de chispa, y no llega a dar ese susto al lector que le haga pegar el bote en la butaca. En este sentido se queda a medio gas, aparte de desaprovechar un par de elementos argumentales que podían haberle dado mucho más juego (los ya mencionados poderes psíquicos de la novicia, que solo usa una vez y encima, casi al principio, y unos libros antiguos que encuentran, que les podían haber resuelto toda la trama en media hora).
En resumen, una película que está bien, pero se queda en un mero entretenimiento para pasar el rato. Mi puntuación personal, un 5 raspado. Aprobado justito.
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